CONCORD, September 23, 2018 — The Food Bank of Contra Costa and Solano strongly opposes the proposed public charge rule announced this weekend by the Department of Homeland Security. This proposal would make it extremely difficult for many immigrants to come to the U.S. or receive green cards if they are determined likely to become a “public charge,” which would include using public benefits like the Supplemental Nutrition Assistance Program (SNAP, also known as CalFresh).
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This proposed rule targets low-income immigrant families that legally access benefits to help meet their basic needs, but it has had widespread chilling effect throughout the immigrant community. Over the past month, 1 in 5 individuals approached by the Food Bank’s SNAP outreach workers have declined to apply for food assistance due to immigration fears.
Our staff have even heard from naturalized U.S. citizens – who would never be impacted by this policy – asking to terminate SNAP benefits for themselves and their citizen children out of fear that it may affect their immigration status. Whether this proposal directly targets them or not, the threat of public charge is forcing immigrants to make impossible choices between keeping their families together and accessing vital programs that safeguard their health and well-being.
Only 71.8% of eligible Californians actually use SNAP benefits, and anti-immigrant proposals like this threaten our local efforts to improve program access and participation. Every $1 in SNAP generates $1.79 in economic activity, and the program has long-term benefits for participating children’s health and economic outcomes. Public charge threatens the nutrition, health and shared prosperity of our communities.
The Food Bank has joined the national Protecting Immigrant Families campaign to help mobilize the public to condemn this attack on our nation’s health and well-being. We will soon share model comments to submit to the U.S. Department of Homeland Security. We urge you to join us in denouncing this mean-spirited proposal, which will undermine decades of progress in reducing hunger in this country.
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La norma propuesta de Carga Pública quebrantaría los esfuerzos para combatir el hambre y la pobreza
El Banco de Comida de Contra Costa y Solano se opone fuertemente a la propuesta de ley cargo público, anunciada por el Departamento de Seguridad Nacional. Esta propuesta haría que sea extremadamente difícil para muchos inmigrantes venir a Los Estados Unidos o recibir tarjetas de residencia si se determina que se convertirán en una carga pública, lo que incluiría el uso de beneficios públicos como el programa de nutrición suplementaria (SNAP, también conocido como CalFresh.)
Esta nueva propuesta se dirige a las familias de inmigrantes de bajos ingresos que tienen acceso legalmente a los beneficios para ayudar a satisfacer sus necesidades básicas, pero tiene un efecto de escalofrió generalizado en toda la comunidad inmigrante. Durante el último mes, 1 de cada 5 individuos a los que se acercaron los trabajadores de programa SNAP del Banco de Comida se han negado a solicitar asistencia alimentaria debido a los temores de inmigración.
Nuestro personal incluso ha escuchado a ciudadanos estadounidenses naturalizados, que nunca se verán afectados por esta política, pidiendo que se terminen los beneficios de SNAP para ellos y sus hijos ciudadanos por temor a que pueda afectar a su estado migratorio. Si esta propuesta se dirige directamente a ellos o no, la amenaza de la carga publica está forzando a los inmigrantes a tomar decisiones entre mantener a sus familias unidas y tener acceso a programas vitales para proteger su salud y bienestar.
Solo 71.8% de los Californianos elegibles realmente usan los beneficios de SNAP, y las propuestas antiinmigrantes como esta amenazan nuestros esfuerzos locales para mejorar el acceso y la participación en el programa. Cada $1 en SNAP genera $1.79 en actividad económica y el programa tiene beneficios a largo plazo para la salud y los resultados económicos de los niños participantes. La carga pública amenaza la nutrición, la salud y la prosperidad de nuestras comunidades.
El Banco de Comida se ha unido a la Protecting Immigrant Families Campaign para ayudar a movilizar al público para condenar este ataque a la salud y el bienestar de nuestra nación. Pronto compartiremos los comentarios modelo para presentarlos al Departamento de Seguridad Nacional. Le invitamos a que se una a nosotros para denunciar esta propuesta, que quebrantaría décadas de progreso en la reducción del hambre en el país.